viernes, 6 de abril de 2018

Escuchando la Primera Parte de After

Escuchando la primer parte de After, que una amiga del instituto de inglés, leyó, me comentó que era una versión juvenil de 50 Sombras de Grey, pensando en escribir una historia o novela parecida para llegar a las adolescentes que doy tutoría en el colegio donde estudie o para motivarlas.

miércoles, 4 de abril de 2018

Entrevista de Trabajo



Bueno, mi primera experiencia laboral fue en una tienda departamental de ropa deportiva para hombres en un centro comercial que estaba en el primer piso, yo era vendedor, me gustaba mi trabajo, me llevaba bien con todos, no solo con los de mi piso sino con los de los cinco pisos, yo apenas tenía 18 años, todos me querían apoyar, fue así como conocí a Lalo, él era dentista y tenía un consultorio privado en el último piso, me hacía acordar al hombre elástico de los cuatro fantástico, pues a pesar de estar cerca de los cuarenta, era delgado, apenas se notaban sus pocos pelos grises del costado de color algo trigueña, visito la tienda buscando un buzo, me dijo que quería aprovechar el descuento que tenían los trabajadores del centro comercial, me pidió lo ayudara a elegir, me agradeció, en otra oportunidad me lo cruce a la hora de almuerzo, almorzamos juntos, desde ahí se volvió rutina que almorzáramos, en otra oportunidad quedamos en ir al cine que quedaba en el mismo piso donde él trabajaba, a ambos nos gustaban las películas de acción y de terror, decidimos inscribirnos también en el gimnasio del primer piso, todo lo hacíamos juntos, hasta nos bañamos juntos, hasta que un día que nos duchábamos me beso, no me disgusto, pero igual me quede paralizado, luego que pude moverme, lentamente me salí de la ducha, me vestí rápido y no voltee a mirar atrás.

No lo vi por un par de días, yo no lo busque, ni me busco, hasta no fui al gimnasio, pero él visito la tienda, eligió un buzo y pidió que lo ayudara, lo dude, pero fui al probador, mientras él se quitaba su bata de dentista y yo le pasaba el buzo, me jalo de la cintura, me robo otro beso, no lo rechace, le correspondí, nos besamos y acariciamos por largo rato, salí primero para no levantar sospechas, luego él salió, se dirigió a caja para pagar el buzo, al cruzarse conmigo me dijo para que en la salida visitará su consultorio. Estaba algo ansioso esperando la hora de la salida, mientras caminaba hacia al ascensor, me cruce con Carlos, el guardia de seguridad, que me sonrió coquetamente, movió su lengua de un lado a otro y saludo con la mano de lejos deseándome  buenas noches. La subida del ascensor me pareció eterna, cuando se abrieron las puertas, corrí como desesperado hacia el consultorio, toque la puerta, se abrió, no estaba cerrada, Lalo estaba ahí en el diván, con su bata, pero me di cuenta que debajo estaba desnudo, me lance hacia el diván para besarlo, acariciarlo y mezclamos su piel trigueña con mi piel blanca en el cuero negro del diván. Después de esa noche, empezamos hacerlo en todos los lugares del centro comercial, las duchas del gimnasio, los baños, el estacionamiento hasta en el cine y en todas las posiciones. Una noche que tomaba una vez más el ascensor para subir a ver a Lalo, me cruzo con Carlos, el guardia seguridad, tendría la misma edad que Lalo, ni tan feo ni tan bonito pero definitivamente más trigueño pues para esos puestos los quieren así, pero esta vez aparte de sonreírme, se me acerca, me da la mano, se atrevió a decirme que tal era el servicio del dentista, que le gustaría probar y visitar su consultorio, me sentí incomodo, esa noche no pude disfrutar el sexo con Lalo, le conté lo ocurrido, note la preocupación  en el rostro de Lalo, pues Carlos tenía las cámaras de seguridad, seguro había visto todo y lo sabía todo, Lalo se vistió y se fue, dejándome ahí. Falto a trabajar durante varios días, hasta que me entere que ya no trabajaba más ahí, lo llamaba y no contestaba, llore durante varias noches.

Desde ahí no me gustan los guardias de seguridad, quizá no era el único en el centro comercial que se sentía así, porque Carlos una mañana amaneció muerto, le habían arrancado los ojos. Dígame ¿en su empresa tienen guardias de seguridad o cámaras?